Juan Sebastián Elcano fue el capitán del primer barco que dio la vuelta al mundo hace 500 años, una efeméride que un grupo de amantes de la mar y de la historia celebra con la réplica de su viaje en un velero de 21 metros, el Pros, y que ha reconocido la Nasa poniéndole su nombre a unas montañas de Plutón.
La falta de interés por la historia y la «leyenda negra» han evitado que Elcano sea reconocido como artífice de una hazaña más importante aún que la de la llegada del hombre a la Luna, según dice a bordo del velero Pepe Solá, presidente de la asociación de Amigos de los Grandes Navegantes y Exploradores Españoles (ANGYEE), promotora de la réplica del viaje de hace medio milenio.
«El mar nos une, no nos separa. El mundo conectado, por encima de credos, razas y costumbres se hacía realidad tras aquella expedición», subraya la asociación, fundada hace tres años por amigos jubilados de numerosas profesiones y con interés por «recuperar la ilusión por la historia española«, que no fue «exterminadora» como, a su juicio, quieren hacer ver anglosajones y holandeses.
Redacción (Agencias).