¡Marchando una de palomitas!

Seguro que casi siempre que vamos al cine, pedimos palomitas. Una costumbre que tiene su origen en época de la Gran Depresión de Estados Unidos entre los años 1929 y 1933. Una época en la que 33 millones de estadounidenses se quedaron en paro, el principal método para evadirse era ir al cine que por aquel entonces era un espectáculo que estaba al alcance del bolsillo de casi todos.

 Pues bien, qué mejor manera de pasar esos ratos delante de la pantalla que comiendo algo. ¿Y qué? Pues palomitas, sí, porque era un alimento que se preparaba al instante y además el maíz es una materia prima muy abundante en el país norteamericano. Por aquel entonces, los vendedores de palomitas cosechaban unos beneficios de hasta el 2.500%

 Hace unos meses, el presidente de la cinematográfica Sony Pictures, Michael Lynton, propuso a las cadenas de cine que ofrecieran, junto al mítico cubo de palomitas, unos snack más saludables, como yogures o copas de frutas y es que atención, porque una ración grande de palomitas aporta nada más y nada menos que 1.800 calorías. 

Redacción (Agencias)