El calzado más antiguo de Europa

La Cueva de los Murciélagos (Albuñol, Granada) alberga los vestigios de un cementerio milenario. En él se han encontrado, entre otras cosas, utensilios, punzones de hueso, puntas de flecha y herramientas de piedra. A ello hay que sumar una veintena de sandalias de esparto que se consideran el calzado más antiguo de Europa.

El arqueólogo de la Universidad de Alcalá y autor del nuevo estudio es Francisco Martínez. Destaca que hay dos grandes grupos de objetos y materiales de esparto. “Los cuatro mejor conservados tienen unos 9.500 años. Son del periodo mesolítico, de dos milenios antes de que llegara la agricultura a la región”, destaca.

En cuanto a las sandalias, “no hay calzado anterior a las esparteñas en Europa”, añade. Es el calzado más antiguo de Europa. De casi todas solo quedan las suelas. Hay un par de ellas de las que surgen lo que debieron ser unas tiras. Se cruzarían como hoy lo hacen en las sandalias de playa y las unirían al tobillo.

Además de su buena conservación, llama la atención que todas pertenecen a individuos infantiles, “como de un 28 de pie”, y casi todas serían de enterramientos de niños, pero además las habrían usado en vida porque están desgastadas.

Redacción

Fotografía · Proyecto Mutermur