El origen de las neuronas

Las células secretoras especializadas presentes en los placozoos -animales marinos de alrededor de un milímetro de tamaño que habitan discretamente en zonas marinas poco profundas- podrían haber dado lugar a neuronas en animales más complejos hace más de 800 millones de años.

Los placozoos son animales diminutos que se alimentan de algas y microbios que viven en la superficie de rocas y otros sustratos encontrados en mares cálidos y poco profundos. Estas criaturas, con forma de disco aplanado, están entre los animales más simples conocidos, y no tienen partes del cuerpo u órganos.

Impulsados por la curiosidad sobre el origen de estas células, los autores del estudio utilizaron una serie de técnicas moleculares y modelos computacionales para entender cómo evolucionaron los diferentes tipos de células de placozoos y reconstruir cuál podría haber sido su aspecto y cómo podrían haber funcionado nuestros ancestros.

El estudio muestra que los nueve tipos celulares principales en los placozoos parecen estar conectados por muchos tipos de células ‘intermedias’ que cambian de un tipo a otro. Las células crecen y se dividen, manteniendo el delicado equilibrio de los tipos celulares necesarios para que el animal se mueva y coma. Esto contrasta con la existencia de linajes celulares bien separados que se encuentran en los cuerpos humanos.

Estas células se comunicaban mediante neuropéptidos, pero eventualmente adquirieron nuevos módulos genéticos que les permitieron crear el andamio post-sináptico, formar axones y dendritas y crear canales iónicos que generan señales eléctricas rápidas.

Sin embargo, la historia evolutiva completa de los sistemas nerviosos aún está por contar. Se cree que la primera neurona moderna tuvo su origen en el ancestro común de los cnidarios y los bilaterales hace unos 650 millones de años.

Redacción (Agencias).