«Moonage Daydream»: el documental sobre Bowie

Moonage Daydream es el documental que narra la historia del artista y cantante David Bowie y que toma su título de su canción de 1971 con el mismo nombre.

 «El caos y la fragmentación» eran espacios en los que David decía sentirse «muy cómodo» a la hora de crear y son también los principios sobre los que se construye «Moonage Daydream», el ambicioso documental que se estrena este viernes 30 de octubre y que intenta capturar su escurridiza genialidad.

Brett Morgen, es el autor que pone su esfuerzo en este maravilloso trabajo y que ha pasado más de cinco años para dar por terminada esta cinta. La película se presentó en el Festival de Cannes y pudo verse también en la 70 edición del Festival Internacional de Cine de San Sebastián.

Según la información oficial, el realizador se sumergió en unos cinco millones de artículos, entre los que se encontraban dibujos nunca vistos, grabaciones, películas y diarios, y llegó a emplear cuatro años solo en el montaje, un montaje peculiar que a muchos les parecerá que no sigue ninguna pauta.

CAOS Y FRAGMENTACIÓN COMO LÍNEA ARGUMENTAL

«El caos y la fragmentación son definitivamente mi línea argumental», esboza Bowie en un momento del metraje de este documental que lleva el título de uno de sus famosos temas.

Esa «estructura laberíntica» que en su opinión subyace bajo el aparente orden temporal y espacial del mundo es lo que persigue Morgen con su montaje, un «caleidoscopio» en el que no existe apego por la exactitud cronológica, con constantes avances y retrocesos.

Como aval, sus responsables destacan que ha sido la primera película apoyada totalmente por los herederos de Bowie, que han permitido el acceso a la enorme colección del artista, aunque el grueso de su contenido lo componen sobre todo entrevistas concedidas a medios de comunicación a lo largo de toda su carrera.

LA INTIMIDAD DE BOWIE EXPUESTA

«Emocionalmente muy sensible», en Moonage Daydream también se tocan otros temas clave de su biografía personal, como su ambigüedad sexual o la soledad autoinfligida para dar rienda suelta a un flujo inagotable de proyectos hasta que conoce a la modelo Iman e inicia cierto proceso de reconciliación con el mundo.

Cabe destacar además la posibilidad de disfrutar de su música, no solo de las clásicas grabaciones de estudio, sino de actuaciones en vivo atípicas en las que Bowie despliega todo su carisma y cuyo sonido, gracias al trabajo de su equipo de toda la vida.

De este modo, Moonage Daydream es una ensoñación lunar no apta para todos los espectadores pero que sumerge al público en la caótica y singular mirada de David Bowie.

Redacción (Agencias)