El sonido de los animales y el cambio climático

Científicos de la Universidad Autónoma de Madrid han comprobado que el sonido de los animales sirve para estudiar el cambio climático.

Los cantos, trinos, chirridos y vocalizaciones que emiten los demás animales, contienen información valiosa para evaluar el cambio climático. Todo esto surge gracias al uso de nuevas tecnologías de seguimiento acústico. Un grupo de investigadores de la UAM, la Universidad de Alcalá de Henares y demás universidades, han demostrado que estos sonidos pueden ofrecer pistas sobre el cambio climático.

¿Por qué los sonidos de los animales?

Son muchas las especies que emplean la comunicación acústica para desempeñar funciones esenciales. Algunas de estas funciones son: la reproducción, la defensa de territorios o la búsqueda de alimento.

Es por ello que se han combinado sensores automáticos y algoritmos de reconocimiento de voz. El equipo ha desarrollado un método que permite examinar cómo están cambiando los ritmos de reproducción o las áreas de distribución de las especies. La finalidad principal es predecir el impacto a largo plazo que el cambio climático podría causar en sus poblaciones.

Si hay cambios en el medio ambiente, es predecible que los animales modifiquen su actividad.

La primera especie evaluada

La rana de San Antón es una especie que se sirve del canto para encontrar parejas reproductivas, por lo que esta opción era la más óptima. Los autores de la investigación han subrayado que este estudio ha dado resultados prometedores.

«Methods in Ecology and Evolution» es una revista donde se han publicado los resultados y se ha dado a conocer esta herramienta novedosa para identificar posibles cambios en el medio ambiente.

Redacción.