El confinamiento dio mucho de si. Cocina, practicar ejercicio o cuidar las plantas. Esta última ha sido toda una afición que ha evolucionado a pasión en el caso de Mark Lashmar que ha ido sumando nuevos ejemplares a su colección y presenta ya su casa plagada de hojas verdes.
Hasta tal punto llega su obsesión que posee más de 250 plantas en su apartamento de tres dormitorios en Colchester, Essex. De hecho, se calcula que se ha dejado más de 10.000 libras esterlinas, habiendo entre sus favoritas raras importaciones internacionales.
A pesar del tamaño de su colección, las plantas son un mero pasatiempo para Mark, que trabaja a tiempo completo en el departamento de informática de un bufete de abogados.
