El trabajo en turnos nocturnos está relacionado con irregularidades en el ciclo de las mujeres y conlleva un aumento de las posibilidades de desarrollar endometriosis. Así lo revela un estudio de la Universidad Nacional y Kapodistríaca de Atenas (Grecia).
Se trata del primer estudio centrado en las alteraciones de los genes reloj centrales y su impacto en las mujeres con endometriosis. Se trata de una enfermedad que afecta al 10% de las mujeres y jóvenes en edad reproductiva, unos 190 millones en todo el mundo.
La investigación revela que la alteración del ritmo circadiano en las trabajadoras sometidas a horarios nocturnos se ha asociado a la irregularidad menstrual, mayor riesgo de endometriosis y también de tumores de ovario.
