Una mascarilla que cambia de color con fiebre

La empresa alicantina Colorprint Fashion ha desarrollado y patentado un tejido capaz de activarse con el aumento de la temperatura corporal.

El tejido cambia a color blanco aproximadamente a una temperatura de 37´5 grados centígrados y tiene una filtración bacteriana del 98%. Las mascarillas térmicas son reutilizables, permiten su lavado y desinfección sin perder ni afectar a las propiedades del textil.

Con este mismo tejido se han fabricado mascarillas, pulseras y pegatinas. Un cómodo sistema que permite la monitorización en tiempo real de la temperatura y que puede ser de uso muy práctico, por ejemplo, para los más pequeños, coincidiendo con la vuelta a las aulas.

Las pegatinas, al estar en contacto directo con la piel, permiten la detección del aumento de temperatura en lugares públicos o de afluencia de gente a simple golpe de vista. En este caso la pegatina puede ser práctica para garantizar la salud pública, por ejemplo, en los centros sanitarios al controlar de forma rápida y visual si los pacientes que ingresan tienen temperatura.

Redacción (EFE)