Existe la conocida curva de la felicidad y también podemos hablar de la curva de la paternidad, eso sí, pueden ir más que ligadas. Un niño trae alegría y felicidad debajo del brazo.
La maternidad otorga algún kilo que otro a la mujer, pero en esto de coger peso no están solas, los padres también se solidarizan y ganan peso con ellas. La mayoría de los hombres ganan peso en el momento en el que son padres, vivan o no con sus hijos. Este aumento de peso oscila entre 1,5 a 2 kilos. Así lo afirma un estudio de la Universidad de Northwestern (EEUU), la a investigación, que se publica en ‘American Journal of Men’s Health’ , es una de las primeras que ha examinado cómo la paternidad afecta a un importante biomarcador de la salud, el índice de masa corporal.
Uno de los motivos… Todo lo que no comen sus hijos termina, en muchas ocasiones, en el estómago de sus padres.
Redacción (Agencias)
