El que fuera el sueño y obsesión de Michael Jackson ha colgado el cartel de “se vende”. La propiedad, que fue abandonada por el cantante en 2005, está tasada actualmente en unos 30 millones de dólares.
El “Rancho de la Tierra de Nunca Jamás” fue propiedad del artista entre 1988 y 2005 y posee casi 1.100 hectáreas de terreno repletas de maravillas propias de un cuento infantil. Michael Jackson, al estilo de Peter Pan, se mostró como un niño que se negaba a crecer. Por ello, convirtió la propiedad californiana en todo un parque de diversiones que incluía numerosas estatuas de niños, animales, dos ferrocarriles, carruseles, montañas rusas y otros entretenimientos.
“Neverland” saltó de lugar paradisíaco a pesadilla en 2005, cuando la policía registró la propiedad, en el curso de la investigación iniciada anteriormente contra Michael Jackson por supuesto abuso sexual de menores. El artista abandonó el lugar y dijo que jamás volvería allí. Las atracciones y los animales se vendieron a varias entidades y los muebles de la residencia fueron a un almacén de depósitos. “Neverland” cierra sus puertas. Toda una frustración para aquellos que ansiaban que se convirtiera en una propiedad en memoria del “rey del pop”.
Redacción (Agencias)
