Ropa que se lava sola

Volvamos unos años atrás. Por ejemplo, al año 1900. Aunque ya en 1700 se había concedido la primera patente de la “máquina de lavar y escurrir” (o dicho de otra manera, lavadora), poca gente pensaba que años más tarde las lavadoras iban a popularizarse por millones de hogares alrededor de todo el mundo.

Y ahora, volvamos a 2012. Aunque no lo creáis, puede que la historia se repita de nuevo: tal vez, en unos años, las lavadoras desaparecerán de los hogares. La culpa la puede tener un nuevo invento que viene desde Winsconsin: ropa, que se lava… sola.

Y es que los investigadores de la Universidad de Milkwauke han desarrollado un tejido que puede eliminar casi por sí mismo cualquier tipo de mancha. ¿Cuál es el truco? La tela está formada por fibras sintéticas basadas en polímeros del cloropreno, presente en el neopreno, capaz de descomponer todo aquello que se le intente adherir.

Pero claro, para ello necesita una temperatura determinada. En concreto, 35ºC: parece que la naturaleza ha proporcionado éste material al ser humano aposta, porque nuestro cuerpo está ligeramente por encima de esta temperatura.

Y muchos ya habréis descubierto un “pero”: ¿y si es un abrigo? ¿Un jersey? ¿Funciona también? En este caso, los investigadores se han encontrado con un problema, ya que el calor humano sólo eliminará las manchas de la parte del tejido que esté en contacto con el cuerpo humano.

Así que la solución para los investigadores: patentarlo para ropa interior. De esta manera, cualquier mancha que pueda aparecer en bragas o calzoncillos de estos tejidos se borrará enseguida gracias al calor de nuestro cuerpo.

Eso sí… si os ha gustado el invento, aún es pronto para deshacerse de las lavadoras. Los investigadores aseguran que sigue siendo necesario lavar los tejidos una vez al mes, ya que el olor no desaparece.

Esperemos ahora a ver si pronto aparece un sistema parecido para camisetas, pantalones… ¡o incluso zapatos! Sería una bonita forma de olvidarse de lavar, tender… y esperar tanto tiempo para tener de nuevo nuestra ropa impecable.

Borja Bermúdez-Cañete / Agencias