Las jirafas alargaron sus cuellos para comer hojas de los árboles

Las jirafas hembras tienen cuellos proporcionalmente más largos que los machos, lo que sugiere que sus altas necesidades nutricionales pueden haber impulsado esa característica. Esa es la conclusión de un estudio realizado por ocho investigadores pertenecientes a instituciones de Estados Unidos, Suiza o Tanzania, y publicado en la revista ‘Mammalian Biology’.

La hipótesis predominante sobre el alargamiento del cuello de las jirafas es que influyó la competencia entre los machos para cortejar a las hembras. El nuevo estudio, que exploró las proporciones corporales de jirafas salvajes y cautivas, indican que la longitud del cuello puede ser el resultado de que las hembras buscan hojas en los árboles que de otro modo serían difíciles de alcanzar.

En sus teorías clásicas de la evolución, tanto Jean Baptiste Lamarck como Charles Darwin sugirieron que los largos cuellos de las jirafas evolucionaron para ayudarlas a alcanzar las hojas más altas de los árboles, evitando la competencia con otros herbívoros. Sin embargo, una hipótesis más reciente sugiere que la evolución de los cuellos largos fue impulsada por la competencia entre los machos, que balancean sus cuellos entre sí para afirmar su dominio, lo que se denomina combate de cuello. Es decir, los machos con cuellos más largos podrían haber tenido más éxito en la competencia, lo que habría llevado a reproducirse y transmitir sus genes a la descendencia.

«La hipótesis del cuello por sexo predijo que los machos tendrían cuellos más largos que las hembras», indican Doug Cavener, Dorothy Foehr Huck y J. Lloyd Huck, de la Universidad Estatal de Pensilvania (Estados Unidos). Estos autores añaden: “Técnicamente tienen cuellos más largos, pero todo lo relacionado con los machos es más largo; son entre un 30% y un 40% más grandes que las hembras. En este estudio, analizamos fotografías de cientos de jirafas masai salvajes y cautivas para investigar las proporciones corporales relativas de cada especie y cómo podrían cambiar a medida que las jirafas crecen y maduran”.

Redacción · Servimedia

Fotografía · 123RF/25ehaag6