Ha hecho «de todo» y lo ha sido todo, de aprendiz a maestra de fuertes y jóvenes solistas femeninas, de cantar en casinos al registro histórico de llenar cinco veces el Wizink Center en una gira, pero tras 25 años de trayectoria es ahora por fin cuando Malú «disfruta de la música», independientemente de los números.
«Después de 25 años y con 41 años de vida, lo último que me preocupan son las cifras«, asegura a EFE tras la bajada de público que representó su anterior álbum, ‘Mil batallas’ (2021).
Titulado ‘A todo sí’, el disco se ha publicado este viernes como un «ejercicio de generosidad», de sacar canciones emblemáticas de su repertorio «de su lugar de confort» y reinterpretarlas a la medida de sus acompañantes, como ‘Aprendiz’ con Alejandro Sanz, ‘El apagón’ con Melendi, ‘Ángel caído’ con Pablo López, ‘Blanco y negro’ con Manuel Carrasco o ‘Ni un segundo’ con Vanesa Martín.
«Ahora disfruto con la música, me apetece cantar y estar encima de un escenario. He sido consciente de que antes no disfrutaba, por mucho que entonces pensara que lo hacía, porque no sabía gestionar emocionalmente el nivel de trabajo y de exigencia«, explica.
Con invitados como Tomatito, que también participa en ‘Aprendiz’, o como Israel Fernández en ‘Oye’ y Niña Pastori en ‘Enamorada’, transformada en una salsa, en ‘A todo sí’ se percibe un mayor acercamiento al ámbito del flamenco, quizás como un guiño a sus raíces como miembro del clan familiar de Paco y Pepe de Lucía.
‘He pasado a esa etapa de mi vida en la que quiero hacer las cosas que me hacen feliz‘, insiste la artista, que lamenta que en el listado del álbum «faltan muchas canciones y mucha gente» como su amiga Pastora Soler, por lo que está pensando en una siguiente edición.
Dentro de ‘A todo sí’ se incluye un único tema inédito, ‘Ausentes’, que le escribió su amigo Pablo Alborán (quien además canta ‘Todos los secretos’ en el disco) tras una tarde juntos de confidencias y sentimientos sobre la mesa.
«Aquella tarde fue muy bonita, como lo fue la evolución de esa canción y el camino. Es de esas canciones que he ido haciendo en mi carrera con esa pasión de cuando estás contando algo importante y siempre es una catarsis cuando realmente dejas salir algo que te duele en el pecho», apunta sobre la honestidad del corte.
Redacción (Javier Herrero/ EFE).
Fotografía: EFE.