El deporte es un hábito crucial para gozar de una vida saludable, tanto por sus beneficios a nivel físico como psicológico. Cuando uno decide iniciarse en la práctica de ejercicio, siempre se suele emprender el camino con un objetivo en mente, ya sea este sentirte más saludable, ganar agilidad, mejorar la resistencia física o mantener el cuerpo en forma. Sin embargo, alcanzar estas metas deportivas no siempre resulta tan sencillo, y un bajo rendimiento deportivo suele tener mucho que ver en ello.
Si llevas ya algún tiempo entrenando y no sientes mejoría, o si acabas de iniciarte en el deporte y no sabes por dónde comenzar a trabajarlo, desde Lanier Pharma recomiendan cinco ‘tips’ que puedes incorporar con facilidad a tu rutina y ayudarán a aumentar tu rendimiento:
1. Cuida tu nutrición:
La comida es la gasolina del cuerpo. Para un correcto desempeño deportivo, es recomendable el consumo de alimentos altos en carbohidratos (arroz, patata, quinoa…) ya que estos llenarán los depósitos de glucógeno y dotarán de mayor resistencia. Hay que tener en cuenta que un deportista sufre mayor estrés oxidativo por lo que también deberás escoger alimentos nutricionalmente densos, aquellos que contengan gran cantidad de vitaminas, minerales, antioxidantes… como las legumbres, verduras, pescados…. Y evitar las “calorías vacías” alimentos que solo aportan calorías y apenas tienen nutrientes (bollería industrial, refrescos…)
2. Hidrátate correctamente:
El agua es fundamental, sobre todo si estás realizando actividad física. La buena hidratación te garantiza la energía que necesitas para estar en forma y aguantar el ejercicio. Un deportista puede beber entre 2,5 y 3 litros de agua al día. Así que, cuando salgas a ejercitarte, no olvides tu botella de agua.
3. Opta por entrenamientos variados:
Uno de los grandes errores que se suele cometer al entrenar es repetir una y otra vez los mismos ejercicios y trabajar constantemente los mismos músculos. Este no es un buen método, ya que no te permitirá desarrollar todo tu potencial. El cuerpo se acostumbrará y llegará un punto en el que tus resultados se estanquen. Cambiar tu rutina deportiva no solo beneficiará tu rendimiento, sino que también te ayudará a mantenerte más motivado y no caer en la monotonía.
4. No descuides tus descansos:
Tan importante es entrenar como la recuperación tras el esfuerzo. Una correcta recuperación permite tener tu cuerpo descansado para poder volver a someterlo a un nuevo esfuerzo. Tómatelo como una fase más del ejercicio, porqué es imprescindible. De este modo favorecemos una progresión natural y saludable en nuestro rendimiento deportivo, a la vez que disminuimos el riego de lesiones.
5. Elige suplementos naturales:
No todos los suplementos naturales para el deporte sirven para todos los propósitos. Algunos te ayudan en el proceso de recuperación, otros a aumentar tu resistencia, otros la fuerza. Componentes como la taurina (mejora el rendimiento deportivo), citrulina (promueve adecuada hidratación) o HMB (aumenta masa y reduce daño muscular) son perfectos si buscamos acompañar nuestro entrenamiento y alimentación equilibrada con nutracéuticos que aportan la energía necesaria a nuestro cuerpo.
