En el primer episodio del programa de radio de Apple Music 1 ¿Qué haría Dolly? junto a la copresentadora Kelleigh Bannen, Dolly Parton revela que Chet Atkins (influyente productor y guitarrista de country) le dijo que bajara el tono de su look en sus comienzos y comparte anécdotas sobre su madre, su marido Carl, el famoso mono de la portada del álbum Jolene, las primeras críticas por su peinado y maquillaje y mucho más.
En este sentido, Dolly Parton asegura que 60 minutos le bastan y le sobran para estar lista: «Dicen que cuanto más natural tienes que parecer, más tiempo parece que cuesta. Así que lo mío es más fácil porque sé que va a parecer falso. Me pinto, me empolvo, me pongo colorete y pestañas. Me pongo una peluca y estoy lista. Me visto más rápido que la mayoría de las chicas».
Además, la artista confiesa que Chet Atkins le dijo que bajara el tono de su look en sus comienzos. Tal y como recuerda la propia Parton de la boca de Atkins salieron estas palabras: «Dolly, realmente no creo que la gente te tome en serio como cantante y compositora a menos que bajes el tono de tu aspecto. Eres una chica muy guapa. No necesitas todo eso».
No obstante, a lo largo de su vida ha tenido que lidiar con numerosas criticas sobre su forma de peinarse y maquillarse: «Me peinaba yo y peinaba a mi familia, porque tenía un don para eso. Pero usaba demasiado maquillaje y muchas de las madres de la escuela pensaban que yo era una mala influencia para sus hijas, creían que era demasiado cutre, un poco demasiado esto o lo otro. Pero sus hijas eran las que causaban todos los problemas, corriendo detrás de los chicos y todo eso. Yo era bastante inocente en ese sentido.»
Una afición por el maquillaje que le viene desde bien pequeña ya que -según confiesa- se metió en algún que otro lío para conseguir algo en las montañas que le ayudara a pintarse los labios, como recolectando bayas que manchaban para siempre, usando harina como polvos, cerillas quemadas…
Redacción
