A pesar de que la mente y el cuerpo siguen activos mientras dormimos, nunca nos caeremos de la cama.
Estar dormido no significa estar inactivo. Mientras dormimos roncamos, hablamos, damos vueltas en la cama… Al fin y al cabo, nuestro cuerpo permanece activo mientras dormimos aunque no seamos conscientes.
El profesor Russell Foster, de la Universidad de Oxford ha afirmado que pensamos que estamos desconectados del mundo que nos rodea, pero esto no es así. «Si alguien grita cerca, te despiertas». Hay un sentido que definitivamente no se queda dormido. Estamos hablando de un posible sexto sentido, no lo perdemos cuando nos quedamos dormidos. Nuestro cuerpo es sabio y va a hacer lo posible para que nuestro descanso sea pleno.
Un sexto sentido
Los científicos como Foster no se refieren a ese sexto sentido que todos conocemos como algo esotérico. Se trata de la propiocepción y los expertos lo conocen desde hace más de un siglo. ¿Lo quieres ver en acción? Pues ahora te retamos a que te toques la punta de la nariz con los ojos cerrados. Has podido sin ningún problema, ¿verdad? Esto se debe a que tenemos conciencia de dónde se encuentra cada una de las partes de nuestro cuerpo en el espacio.
Gracias a ese «sexto sentido«, podemos movernos con total libertad en la cama sin rebasar las fronteras de ésta. Como consecuencia, no nos caemos de la cama porque nuestra propiocepción conoce los límites.
Redacción.
