9 años de la muerte de Lou Reed

Pocos artistas de rock han sido más influyentes sin alcanzar el estrellato. Mientras coqueteaba con el éxito comercial entre 1970 (cuando dejó la Velvet Underground) y 2013 (cuando sucumbió a una enfermedad hepática) logró un enorme seguimiento pero nunca llegó a consolidarse en el mainstream.

Sin embargo, su composición, inusualmente culta y que a menudo abarcaba temas que burlaban las convenciones de la sociedad, especialmente en términos de drogas y sexo, abrió nuevos caminos que seguirían otros artistas. Además, su voluntad de confrontar a su público lo convirtió en un precursor de vital importancia para la revolución punk de mediados y finales de los 70. A menudo decía que su objetivo era aplicar la libertad y la sensibilidad creativa de la literatura a la música rock.

Reed no era tan célebre como guitarrista, pero su estilo a la hora de interpretar lo convirtieron en una referencia para los músicos que valoraban la pasión y el sentimiento por encima de las habilidades. En su catálogo, Lou Reed experimentó con diversos géneros como el glam (con Transformer), art rock (con Berlín), hard rock (como se puede ver en Rock N’ Roll Animal), noise (en Metal Machine Music), o rock con trazas de jazz (como se escucha en The Bells). A pesar de todos sus cambios, nunca dejó de sonar como Lou Reed.

Redacción

Fotografía · Kevin Winter