El 47 % de los dueños de mascotas no sabe cómo debe llevarlas en su vehículo en los desplazamiento, lo que puede generar riesgos. Así lo revela un estudio realizado por RACE y que pone de manifiesto el desconocimiento de muchos conductores, fruto de una norma de tráfico que no especifica de forma clara cuál debe ser el sistema de retención o de protección del animal.
La normativa únicamente especifica que la mascota no debe interferir con el conductor. Un 62 % de los encuestados utiliza arneses de seguridad para anclara a los animales a los asientos, como si de un cinturón de seguridad se tratara, mientras el 12 % apuesta por el uso de transportines sujetos con el cinturón (algo que no se debería hacer, por el riesgo de que el animal salga despedido al romperse la caja). Frente a estos, 10 de cada 100 apuestan por colocar el trasportín en el maletero y un 8 % utiliza barras o redes de separación.
En el caso de un choque frontal a unos 50 km/h, las mascotas sin retención podrán producir altas cargas de impacto. Por ejemplo, un perro de 20 kg tendrá una carga de impacto que superará la media tonelada.