Eurovisión se adapta a las restricciones

Unos 3.500 espectadores accederán a la final de la 65 edición del Festival de la Canción de Eurovisión que se celebrará entre el 18 y el 22 de mayo en el centro Ahoy de Róterdam (Países Bajos).

En plena era pandémica, el Covid-19 impone una serie de restricciones que impedirá el acceso del público que no sea neerlandés. Además, tanto el público como las delegaciones de cada país deberán someterse a una prueba PCR para confirmar que están libres del virus.

La agencia EFE ha tenido acceso a las preparaciones para la edición de esta final de Eurovisión 2021 después de que el año pasado el centro Ahoy cambiara la música por las camas de hospital. El confinamiento y la dureza de la primera ola obligó a reconvertirlo en un hospital improvisado para pacientes con coronavirus y que en la segunda ola pasó a ser un centro de PCR.

La organización ha pensado “en todos los posibles escenarios” por si algo sale mal, como por ejemplo que se confirme un positivo entre algún artista que obligue a activar el protocolo de aislamiento y seguimiento de contactos: “Cada delegación ha preparado una actuación en video en el estudio de su país para que, en caso de cuarentena, tengamos lista una grabación para emitirla», asegura la directora del Ahoy, Jolanda Jansen.