En este bar… quienes fichan son los clientes

Los clientes de un bar que ya lleva la fiesta en su nombre, O Jaiteiro, en Betanzos (A Coruña), se han acomodado al registro horario a su manera, impulsados por el dueño, pues pueden fichar con su huella dactilar en una máquina que mide el tiempo que pasan en su interior.


Con este curioso método, los clientes consiguen puntos que después se traducen en obsequios tales como una consumición o ropa. Para obtener regalos únicamente hay que pasar tiempo en el bar porque «cada hora son diez puntos» y por cada centena el regalo es una consumición, mientras que a los 300 ya la suerte tiene forma de camiseta.

Es la novedosa iniciativa del propietario de este negocio que ha contado que tal propuesta se le ocurrió para de algún modo «fidelizar» a sus «clientes de siempre», pero ahora se da cuenta de que «está teniendo mucho revuelo» y le viene bien porque, a la vez, «hace publicidad del local» y siempre puede captar nuevos usuarios.

Redacción (EFE)