Día Mundial de los Videojuegos

Los videojuegos y sus aficionados, los «gamers», celebran hoy su día mundial convertidos en la industria cultural más rentable de todas, un estatus que no por eso ha conseguido erradicar el estigma que lo asocia a la violencia y al uso adictivo.

España celebra hoy esta jornada, de origen apócrifo y más seguida en países de habla hispana, convertida en cuarto país europeo en gasto y noveno en creación. La facturación del sector, 1.359 millones de euros en 2017, dobla a la suma del cine y la música.
La semana pasada, el ministro de Cultura, José Guirao, elevó a la industria del videojuego a la categoría de cultura durante la apertura de Gamescom, la feria más importante del sector que se celebra en Colonia (Alemania), donde España era este año el país invitado.

Este respaldo institucional llega meses después de que la Organización Mundial de la Salud incluyera el trastorno por los videojuegos («videogames disorder») como una enfermedad mental, un jarro de agua fría para el sector, que lucha contra el estigma desde hace años.

Edutaintment y Serious Games

Además, en los últimos años ha florecido toda una serie de títulos bajo el apartado de «serious games» (juegos serios), cuyo fin didáctico va de la mano con el de entretener.

El tratamiento de fobias es uno de los campos en el que más utilidad están encontrando: «Los videojuegos ofrecen un entorno seguro», argumenta Javier Arévalo, desarrollador y director académico del área de Videojuegos, del centro universitario U-tad, que ha desarrollado este último videojuego.

Redacción (Agencias)