«Comida 3D»

Las impresoras 3D ya han comenzado a imprimir comida, incluso menús sin gluten y con un control exhaustivo de los ingredientes, por lo que pronto se ganarán un lugar en las cocinas, entre la cafetera y la tostadora.

Así lo augura el nutricionista Alex Vidal, profesor de los Estudios de Ciencias de la Salud de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), que ha destacado que esta nueva tecnología, además de emplearse para imprimir piezas en el sector industrial, fabricar prótesis para la medicina o elaborar las figuras más diversas de decoración, también están entrando en la cocina.

Según Vidal, de momento las impresoras 3D han entrado en las cocinas de grandes restaurantes y servicios de comida, pero en un futuro próximo, aspiran a convertirse en un electrodoméstico más con fines gastronómicos.

Redacción (Agencias)