La noticia llega en malas fechas. Y es que la flecha de Cupido pasa factura a tu báscula. Eso es lo que asegura la última encuesta de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad.
Según la SEEDO, el amor engorda una media de 4,5 kilos durante el tiempo que pasa desde que nos enamoramos hasta que la relación se consolida. Esa es una de las conclusiones sobre una muestra de más de 2.300 mujeres de entre 31 y 40 años, en su mayoría casadas o en pareja, con hijos, estudios superiores y residentes en ámbitos urbanos. Al principio de la relación, el 25,6% asegura comer menos compulsivamente frente el 50,7% que come más cuando finaliza.
El porqué de esos kilos ganados hay que buscarlo en el acomodo que se produce en una pareja ya consolidada. Otra variable que se ve afectada son las horas de sueño, ya que se duerme menos de lo habitual cuando se está sin pareja y al finalizar la relación.
La encuesta deja otro dato muy interesante, ya que el 66% vuelve a ‘comerse la cabeza’ con los kilos de más cuando llega la separación.
Redacción (Agencias)
