50 años después… Ringo encuentra a sus fans

1964. Los Beatles han sacado a la venta «A Hard Day’s Night», y ya son mundialmente conocidos. Durante una gira, Ringo Starr ve que tiene cinco fans detrás de su limusina, persiguiéndole en un coche descapotable. El baterista no lo duda: saca su cámara y toma una foto.

2013. Ringo Starr publica su libro «Photograph», que recoge fotografías tomadas por él mismo a lo largo de su vida. Entonces se fija en una de ellas, en la que aparecen cinco jóvenes en un automóvil. Ringo cree recordar que esa foto la tomó en Miami, y toma una decisión: va a buscar a esos cinco fans.

Es ahí cuando un abogado de Boston, Kenneth Kolpan, desvela al diario The Miami Herald la identidad de los muchachos que aparecen en la foto: se trata de unos compañeros de secundaria suyos. Sólo hay un detalle: ¡los adolescentes estaban en Nueva York, y no en Miami!

En un e-mail, el abogado desvela la historia de esa fotografía: «los muchachos faltaron a clase y se fueron al aeropuerto de La Guardia a ver a los Beatles […] de regreso de La Guardia, ellos vieron cuatro limusinas y creyeron que se trataba de un entierro, pero en cada limusina viajaba un Beatle».

Aunque hasta el momento ninguno de los que aparecen en la fotografía ha confirmado su identidad, Kolpan ha identificado a cada uno de ellos. El que está al volante, según ha dicho, es el difunto Gary Van Dursen, y el que viaja en el asiento delantero es Robert Toth. En los asientos traseros se encuentra, asomado a la ventanilla, Charles Schartz. A su lado, Matty Blender, ya fallecida, y otra chica, Arlen Norbe Ressler.

«Es una gran foto. Ellos nos miran (asomados a la ventanilla del coche) y yo les fotografío», ha sentenciado el Beatle.

Una bonita historia que ya no es sólo parte de la historia de Ringo Starr, de los Beatles, del abogado Kolpan y de los cinco adolescentes… ¡sino que, tal vez, se llegue a convertir en una de las anécdotas más curiosas de la historia de la fotografía!

Borja Bermúdez-Cañete / Agencias