Un reciente estudio liderado por la Universidad de Surrey (Reino Unido) ha demostrado que la estimulación eléctrica de ciertas áreas del cerebro puede mejorar la capacidad para aprender matemáticas. Aunque el aprendizaje matemático tiene una base innata, los investigadores encontraron que al aplicar estimulación en la corteza frontal y parietal, regiones asociadas al cálculo y la memoria, se puede potenciar el rendimiento en tareas numéricas.

Durante el experimento, 72 jóvenes participaron en ejercicios matemáticos mientras se analizaban sus conexiones neuronales, y posteriormente fueron divididos en tres grupos: uno recibió estimulación en la corteza frontal, otro en la parietal, y un tercero recibió un tratamiento placebo. Además, los científicos utilizaron resonancias magnéticas para estudiar dos compuestos cerebrales, el glutamato y el GABA, que influyen en la capacidad de aprendizaje.
Los resultados mostraron que las personas con menor conectividad neuronal mejoraron significativamente su desempeño tras recibir estimulación. Este hallazgo sugiere que la técnica podría servir como apoyo para quienes presentan desventajas biológicas en el aprendizaje, según explicó el investigador Roi Cohen Kadosh. Esta estrategia podría abrir nuevas vías para intervenir en dificultades cognitivas específicas, como los problemas con el cálculo.
María Ruz, psicóloga de la Universidad de Granada, valoró positivamente el estudio por su aporte teórico y aplicado, aunque advirtió que la muestra del estudio es pequeña y que sus aplicaciones prácticas aún son limitadas. También subrayó la importancia de investigar los efectos a largo plazo y en contextos cotidianos, como los exámenes escolares, para evaluar el verdadero impacto de la estimulación cerebral en la vida real.
Redacción (Agencias).




