7 años sin Whitney Houston

Dicen que no morimos cuando nos vamos, sino cuando nos olvidan. De alguna manera Whitney sigue muy viva para nosotros cuando se cumple el sexto aniversario del adiós de la gran artista. No hay día que no pongamos alguno de sus grandes éxitos, pero hoy queremos homenajearla recordando los mejores momentos de su carrera. Desde su primera aparición en televisión pasando por su interpretación del himno estadounidense en la Super Bowl de 1991 y muchos más. Aquí los tenemos:

Debut en el show de Merv Griffin (1985)

La describían en el programa como «elegante y sensual». Joven y desconocida por aquel entonces, dejó con la boca abierta a la audiencia interpretando «Home«, balada del musical de Broadway The Wiz que fue llevada a la gran pantalla con Diana Ross en 1978. Whitney publicaría este single dos años más tarde.

Directo en el ‘Welcome Home Heroes’ (1991)

Justo después de su icónica actuación en la Super Bowl, Whitney decidió unirse a un concierto especial de homenaje a la tropas que luchaban en la Guerra del Golfo, sus familias y todos los miembros del ejército estadounidense. El concierto tuvo lugar en la estación militar de Virginia. El concierto fue un éxito pero se puede sentir un público en éxtasis con esta aparición en particular.

«I Will Always Love You» en los GRAMMYs (1994)

Después de un año dominando las listas de éxitos, Houston dio el pistoletazo de salida a los Grammy Awards con su ‘I Will Always Love You. La ceremonia fue un mero postre después de ella. No obstante, subiría de nuevo al escenario para recoger 3 premios a Mejor Álbum, Grabación del año y Mejor Interpretación Pop Femenina. ‘El Guardaespaldas‘ fue su gran trampolín a la fama.

Himno de EE.UU en la Super Bowl (1991)

En la cima de su carrera, con solo 28 años, Whitney se plantó en el centro del estadio de Tampa para interpretar ‘The Star-Spangled Banner‘, el himno nacional. De alguna manera era un reflejo de lo que se había convertido: era «la chica de América»; una mujer bellísima con una voz de ángel irrepetible y una sonrisa para morirse. Llegaba a las notas más altas con tanta fuerza que erizaba la piel. Los Giants de Nueva York se llevaron el trofeo a casa pero fue ella la verdadera ganadora.

‘One Moment in Time’ en los GRAMMYs (1989)

Se convirtió provisionalmente en el himno nacional cuando Houston la grabó con motivo de las Olimpiadas de 1988. Aunque no llegó al número uno de las listas, siempre provocará reminiscencias de los JJ.OO. y será una joya atemporal. La ovación en pie del público es solo una muestra de la conmovedora interpretación que se vivió aquella noche.

(Redacción)