Se acerca Halloween, una fecha propicia para el género de terror. Un estudio de la Universidad de Westminster revela que sentarse en el sofá a «disfrutar» de una película de miedo ayuda a quemar calorías y produce adrenalina, lo que mejora la capacidad de respuesta. Así, ver por ejemplo “El Resplandor” consume 184 calorías. Es el equivalente a una caminata de 40 minutos.
La investigación revela que durante su visionado, el pulso se acelera y se produce un aumento del ritmo cardíaco, del consumo de oxígeno y de la expulsión de dióxido de carbono. Estos cambios se generan como consecuencia de la liberación de adrenalina como respuesta al miedo, lo que aumenta los niveles de estrés y reduce el apetito.
Películas como «Tiburón» (161 calorías); «El Exorcista» (158 calorías) también equivalen a una sesión de ejercicio. Si optas por una versión más ‘light’, «El Proyecto de la Bruja de Blair» te ayuda a consumir 105 calorías.
Redacción