Ya ha pasado un año desde que el robot de la NASA, el Curiosity, aterrizó en el planeta rojo. Desde entonces, no ha parado de enviar fotografías y de tomar muestras que han permitido conocer un poco más este planeta.
Entre los hallazgos, el Curiosity ha permitido saber que Marte pudo albergar vida microbiana en algún momento del pasado y que en él hubo agua. Además, unos geólogos de la Universidad de Brown, en EEUU, han investigado una nueva teoría que explicaría la existencia de los conocidos como ‘dobles cráteres’ de Marte. Según dicen, los cráteres son consecuencia de grandes impactos sobre una superficie que estaba cubierta de hielo. Esto indica que el clima de Marte ha variado en el pasado.
Cada día conocemos más del que dicen que es el planeta más parecido a la Tierra. Al menos, podremos ampliar nuestros conocimientos, ya que el Curiosity se quedará un año más, según lo previsto.
Redacción
